Gentileza de contenidos y fotografías: Rodrigo Ampuero Saavedra
El destino que se encuentra en el Desierto de Atacama necesita de la colaboración, articulación y consenso de todo el ecosistema local para priorizar su sustentabilidad ambiental, social y económica.
“Hacer acciones que van enfocadas en el ahorro de agua y en el cada vez menos consumo de plástico, preferir más productos a granel, reciclar todo lo que se consume dentro del hospedaje. Para mí lo ideal sería algún día llegar a tener un hotel “Zero Waste”, ese es mi sueño, falta mucho porque falta mucha conciencia, mucha educación”. Esta es la opinión de Sandra Fuentes, propietaria de hotel Incahuasi, quien emprendió en 1990 una aventura en bicicleta desde Santiago a La Paz en Bolivia, enamorándose tras su paso por San Pedro de Atacama, sentando las bases de su vida en la capital arqueológica de Chile.
La empresaria turística, socia de la Corporación de Turismo de San Pedro de Atacama, agregó que “lo ideal es que acá no se botara nada, yo reduje, con los años, en un 70% aproximadamente el desperdicio en el hotel y ojalá que pueda llegar a más todavía y que se den las condiciones para seguir evitando el uso de plástico”. Ella ofrece una experiencia única y personalizada en las instalaciones que le rinden tributo a la tierra que la acogieron hace más de tres décadas, respetando lo que los abuelos hicieron con construcciones de cabañas tradicionales en adobe, barro y paja, conservando la sabiduría ancestral que permite mantener las temperaturas, los alimentos y dormir calentitos en invierno, comentó.
Ella al igual que cuarenta y siete pequeños empresarios de la comuna forma parte de la muestra del proyecto que aborda la temática del circuito hídrico en el territorio y que busca generar una herramienta de medición de la huella hídrica del turismo en San Pedro de Atacama. Así también, el proyecto tiene por objetivo crear un manual de buenas prácticas sectorial, esto es, para hoteles, tours operadores, restaurantes, etc., realizando también capacitaciones que ayuden a generar conciencia del uso del agua en el desierto más árido del mundo que es uno de los destinos turísticos más visitados del país.
Circuito hídrico en San Pedro de Atacama
El director de Regenera ONG, Jorge Möller afirmó que en San Pedro de Atacama el recurso hídrico es limitado y en los diez últimos años la población ha crecido en un 300%, es decir, de 4 mil a 14 mil habitantes. Además, el profesional que dirige la organización dedicada al turismo sostenible agregó que también la población flotante está creciendo exponencialmente y el poblado está llegando a las cifras de visitación prepandemia, a lo cual se añade la falta de conciencia por parte de los usuarios que hay un recurso que es limitado y argumentó “la falta de conciencia en el recurso es una urgencia, pero yo creo que llegó el momento en que San Pedro asuma un desafío importante si quiere sostenerse en el tiempo, tiene que entrar a manejar de mucho mejor forma el recurso agua”.
Es en este diagnóstico y situación en la comuna que el investigador avanzado de Eurecat, Cristian Riquelme explicó que “la herramienta en este proyecto va a ser diferencial, en este sentido no queremos que sea una herramienta en la cual simplemente se entregue el dato del consumo de agua que tiene la mipyme en su actividad, sino más bien queremos entregar una herramienta que permita cuantificar el impacto que tiene ese uso de agua en la mipyme, porque existe un impacto muy diferente si extraemos un litro de agua en la región de Antofagasta que en Brasil. Los impactos son diferentes, porque la disponibilidad también es diferente”.
“Hay que generar una campaña educacional respecto al recurso hídrico de San Pedro de Atacama y eso tiene varios focos, primero tiene un foco promocional, nunca he visto a la Subsecretaría de Turismo promocionar a San Pedro de Atacama agregando un mensaje que diga que <todos debemos cuidar el agua en el desierto más árido del mundo>”, expresó el director de Regenera ONG, Jorge Möller. Es más, añadió que “sigan invitando, sin hacer eso, es que van a seguir con 14 mil habitantes y 150 mil o 200 mil visitas en que ninguno llega con una invitación declarada por el destino. Esto, tiene que ser un compromiso transversal de entender que el que llega al desierto más árido del planeta lo puede hacer, pero con estas reglas, porque tiene que entender que aquí el agua cuesta mucho”, sentenció.
El proyecto finalizará en 2026 y quedará en manos de la Municipalidad de San Pedro de Atacama y estará a disposición de todas las personas que lo quieran consultar y quieran conocer más acerca del uso del agua en esta parte del territorio. La iniciativa es un bien público de Corfo de la región de Antofagasta en las que intervienen tres instituciones, la Pontificia Universidad Católica de Valparaíso, a través del Núcleo Biotecnológico de Curauma, Eurecat, que es una organización de Europa con todo un conocimiento en medición de huella hídrica y Regenera ONG que está dedicada al desarrollo sostenible con una especialidad en el turismo sostenible e impacto en comunidades.