Si, leíste bien. Pocoihuén cuenta con sus propios columpios y en estas líneas te invitamos a conocerlo
Uno de los pilares fundamentales del turismo son y serán las personas, mas aún si detrás de ellas hay un esfuerzo por emprender en pro del turismo. Por otro lado, el trabajo colaborativo en este rubro se torna valioso hoy más que nunca.
Después de mucho tiempo “detenidos” producto de la pandemia y otros factores, hemos rodado más kilómetros para seguir dando visibilidad a destinos y emprendimientos de nuestro querido Chile. Ahora nos fuimos a recorrer otro rincón de la maravillosa región de Los Lagos.
Pocoihuén Alto es una pequeña localidad situada al oeste del grandioso Estuario del Reloncaví casi al final de la ruta V-699, misma que también conecta con el Lago Chapo.
Para quienes han visitado las Termas Naturales de Ralún en la zona rural de Puerto Varas, pueden considerarlas como referencia siguiendo por la ruta V-691 y tomar el cruce antes mencionado a la altura del kilómetro 30.
Al llegar al pueblo de Pocoihuén y avanzar pocos metros una vez finalizado el camino pavimentado, llegarán a un pequeño negocio llamado “Jime” en el kilómetro 15.700; ahí un rústico y característico letrero de madera les dará la bienvenida a los bellos Columpios las Quiacas (denominado así por la abundancia de estos árboles).
Una cariñosa y amable familia conformada por la señora Jimena Maldonado y Don Eduardo les darán las indicaciones para poder acceder a su prometedor proyecto turístico, luego por supuesto y como corresponde, pagar un pequeño monto por el acceso.
Un sendero serpenteante y a paso normal, se eleva poco a poco en un trekking de 20 a 25 minutos dejando en cada punto un estupendo cuadro fotográfico con vistas al estuario, montes, volcán Yates y al pueblo de Cochamó. A poco de llegar ya es posible ver la perfecta estructura que albergará el descanso y asombro de los aventureros y entusiastas visitantes.
Así, finalmente y de la nada 1 mirador y 3 perfectos columpios insertos en el bosque te reciben con una panorámica y paz incomparables. Sentado allí puedes experimentar la sensación de volar y no sólo hablo de tu cuerpo, sino que te aseguro que también tu mente lo hará.
Según comenta Jimena Maldonado, hay planes para habilitar en un futuro muy cercano, zonas de camping, miradores, áreas de descanso y almuerzos campestres garantizando así variedad de posibilidades para el disfrute de los visitantes de cualquier edad. Por otro lado, si lo que buscas es un lugar acogedor para alojar y extender tu estadía, lafamilia también posee una cabaña habilitada y disponible para un máximo de cuatro personas.
Si planeas viajar por la zona rural de Puerto Varas no debes omitir este punto en tu itinerario por dos grandes razones: Sin duda tendrás otra nueva experiencia y, por otro lado, apoyarás a una familia en su emprendimiento turístico.
